Morales volvió a hablar de los graves incidentes en Jujuy y dijo que la situación comienza a normalizarse
El Gobernador habló luego de que partidarios de Milagro Sala, militantes del Polo Obrero e integrantes de otras organizaciones sociales realizaron un salvaje ataque a la Legislatura de la provincia
Luego de los días convulsionados que vivó Jujuy, con escenas de violencia por parte de manifestantes que cortaron varias rutas y caminos de Jujuy, el candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio, Gerardo Morales, volvió a responsabilizar al gobierno nacional y sostuvo que la situación se está comenzando a normalizar. Sin embargo, sostuvo que son necesarios más cambios para que la provincia vuelva a estar segura.
Hace semanas Jujuy vive un clima de violencia en sus calles que según Morales, es avalado por algunos dirigentes del Frente de Todos e inclusive por el presidente y la vicepresidenta.
“Han intentado empujarme. Lo vienen diciendo hace varios meses. Dicen que si gobierna Juntos por el Cambio va a pasar esto, y eso no es verdad porque durante ocho años se ha recuperado el orden y la paz en la provincia de Jujuy”, declaró el gobernador y afirmó que son varias trabas las que le está poniendo el gobierno nacional. “Hay una situación que se va normalizando de a poco. Va a llevar por lo menos un mes, un tiempo… me pasó cuando nos hicimos cargo en 2015. Me llevó como cuatro meses ordenar y terminar con el estado paralelo de mucha violencia que manejaba Milagros Sala”.
El 16 de junio se aprobó la reforma de la Constitución en Jujuy. Desde ese día los cortes de ruta regresaron y se instalaron en la provincia. El motivo, la controversia en torno a una serie de reformas institucionales, de las cuáles la regulación al derecho a la protesta y la propiedad de las tierras fueron las más visibles, pero no las únicas. Partidarios de Milagro Sala, militantes del Polo Obrero e integrantes de otras organizaciones sociales realizaron un salvaje ataque a la Legislatura de la provincia luego de una sesión en la que participó el gobernador y durante la cual se juró por la nueva constitución que es resistida por el kirchnerismo.
Según alertó Morales, llegaron a la provincia colectivos con más de 200 militantes de la Cámpora que alentaban el clima de violencia, que supuestamente iba a ser controlado por gendarmería: “Hay tres gendarmes cuidando. Si no interviene nuestra policía, no lo hace nadie. Ellos lo que hacen es cuidar a los que cortan ruta y avalan a toda esta situación de violencia”, señaló sobre el corte del día de ayer en la ruta 66.
Otros de los puntos de conflcito, que estallaron en las calles de la provincia, giraron en torno a la explotación de litio, el reclamo de lo docentes que aún se muestran descontentos a pesar de los últimos arreglos salariales en los diferentes cargos, y por último, la diferencia que hace el presidente en cuanto a la distribución de autorizaciones para la construcción de viviendas provinciales.
“En cuatro años autorizaron 400 viviendo para Jujuy, mientras que 6.000 para La Rioja. Me pararon la obra de una ruta durante cuatro años, me ofrecí a poner el dinero para que pueda ser terminada. No les importo, entonces decidí poner gigantografías que decían ´el gobierno nacional discrimina a Jujuy porque quiere la libertad de Milagros Sala´”, confesó el gobernador en TN durante una entrevista con Joaquín Morales Solá.
Recordó que la primera vez que se reunió con el presidente, le llevó los antecedentes de la dirigente política que está presa desde el 2016, para hacerle ver la cantidad de propiedades, vehículos y riquezas, con las que cuenta.
Según reconoció, hoy en día, hay un sistema gubernamental que permite que las organizaciones sociales “manejen recursos sin control”, lo que genera riqueza en los dirigentes y pobreza en el pueblo, tal cual sucedió en Jujuy hace ochos años atrás.
La estrategia nacional, dijo, está puesta en desinformar y asustar a los jujeños: “El gobierno nacional ha apoyado esto. Les han dicho barbaridades a nuestras comunidades indígenas con quienes estamos trabajando. Se les ha dicho que les voy a quitar las tierras y los hijos”.
De esta forma sigue sosteniendo la idea de que todo lo que está sucediendo en el norte del país es responsabilidad del presidente y la vicepresidenta, que no solo apoyan la violencia de forma implícita sino que “no les importa como esta el país”, sentenció.
“Cambiarán el nombre del partido y se podrán pintar de lo que quieran, pero son los mismos de siempre y hoy tiene que haber un cambio porque ellos ya han fracasado”, afirmó Morales y destacó que el desafío que tiene hoy en día la Argentina es sacar al Frente de Todos del poder.