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Javier Milei se ilusiona con ganar la provincia de Buenos Aires y refuerza las recorridas junto a Carolina Píparo

Sin la posibilidad de una segunda vuelta, La Libertad Avanza se concentra la fiscalización y el líder del espacio acompaña cada vez más a su candidata a gobernadora

Desde que conocieron los resultados de las elecciones primarias, el candidato presidencial por La Libertad Avanza, Javier Milei, ya encabezó tres caravanas por cuatro localidades diferentes de la provincia de Buenos Aires y se mostró en reiteradas oportunidades junto a Carolina Píparo, que compite por la gobernación.

“Depositamos en ella toda la confianza para arrebatarle la provincia al kirchnerismo y echarlo a (Axel) Kicillof”, exclamó el propio líder del espacio al dar su discurso triunfal tras la victoria en las PASO, que lo posicionó como la fuerza más votada a nivel nacional.

En el territorio bonaerense, si bien Píparo quedó en tercer lugar, por detrás de Unión por la Patria y Juntos por el Cambio, al no tener interna, fue la dirigente con segundo mayor porcentaje conseguido de manera individual con 23,76%, superando así tanto a Néstor Grindetti como a Diego Santilli.

La diputada confía en que puede arrebatarle la provincia de Buenos Aires a Kicillof La diputada confía en que puede arrebatarle la provincia de Buenos Aires a Kicillof

Aunque ella quedó lejos del actual mandatario local, que alcanzó el 36,41% de los votos, Milei se ilusionó con la posibilidad de que su lista le gane a la de Kicillof en el distrito más poblado del país, lo que le permitiría, no solamente aumentar sus chances personales de llegar a la Presidencia, sino también tener el poder en un lugar clave.

El economista sabe que, si vence en octubre o en noviembre y asume al frente de la Casa Rosada, no será lo mismo hacerlo con uno de los integrantes de su partido gobernando Buenos Aires que comenzar su gestión con el control únicamente del Poder Ejecutivo Nacional.

En lo que va de septiembre, el libertario ya visitó Ramos Mejía, en el partido de La Matanza, bastión del peronismo en el Conurbano, Merlo, La Plata y Olavarría, siempre acompañando a Píparo, y planea continuar haciéndolo en cada una de las secciones electorales de la provincia.

Por su parte, la candidata a gobernadora comenzó a reforzar su estrategia para alcanzar a Kicillof haciendo foco, principalmente, en los fiscales: de los poco más de 400 que tuvo en las PASO, pasó a unos 1300 voluntarios, según los cálculos que hacen en su búnker de campaña.

Es que, así como a nivel nacional Milei cree que en los últimos comicios le “robaron entre tres y cinco puntos”, el equipo que acompaña a la diputada también considera que el faltante de boletas y de control en algunas escuelas la perjudicó.

Javier Milei, Carolina Píparo y El Dipy en La MatanzaJavier Milei, Carolina Píparo y El Dipy en La Matanza

Ya sin internas, con más fiscales y mejor organización, sumado a que espera que más gente vaya a votar en las Generales de las que fue en las PASO, Píparo confía en que puede mejorar su desempeño electoral y pelearle el cargo al oficialismo, aunque tendrá una única posibilidad de hacerlo, ya que en la provincia no hay segunda vuelta.

En este marco, confiada de lograr su objetivo, la dirigente se prepara para gestionar y ya tiene pensado una serie de reformas que piensa implementar durante su administración, que comenzaría con una fuerte reducción de la estructura estatal.

En su eventual gobierno, de los 1800 puestos de alto rango que existen actualmente, quedarían tan solo unos 500 o 600, ya que el número de Ministerios, por ejemplo, pasará de 15 a 9. Se mantendrían, eso sí, las carteras de Educación y Salud, que en la Nación Milei piensa reducir a Secretarías.

Asimismo, Seguridad y Justicia seguirían siendo dos áreas separadas y no se unificarían, como en la ciudad de Buenos Aires, porque Píparo cree que son dos asuntos importantes que en PBA deben ser manejados por personas diferentes.

Por el momento, no todos los sectores están asignados a una persona en particular y la candidata a gobernadora piensa rellenar los casilleros faltantes luego de las elecciones de octubre, si alcanza el triunfo, pero a su equipo le anticipa una y otra vez que quiere que esos lugares sean ocupados por personas con experiencia y “con los que el bonaerense se sienta identificado”.